lunes, 3 de diciembre de 2012

DELANTE DE UN ESPEJO

Cuando Jaime se quiso dar cuenta, la metedura de pata que acababa de cometer podía haber sido la última que le fuese a soportar César, ya que la estrategia que habia adoptado era la más erronea, no podia jugar a su mismo juego, y mucho menos con la persona que se invento el juego de ponerlo dificil para volverse irresistible....en vez de hacer que César se derrumbase, lo unico que consiguio fue ni más ni menos que ahuyentarlo del todo....

Definitivamente, no daba la tecla con César: cada vez que intentaba planear algo para hacer que él reaccionara y cayese rendido a sus brazos, el único que se caía de bruces al suelo era él mismo, y ya no sabía que hacer para que Cesar volviese con él, y que definitivamente, viajase en ese tren a su lado direccion Santander......se estaba empezando a hacer a la idea de que su deseo no se iba a cumplir, y no sería por las ayudas que había recibido, incluída la de Marta....cuando llegó a casa, no pudo más, y rompió a llorar....

-Pero bueno Jaime hijo, que te pasa ahora?, estas llorando?
-Dejalo mama, dejame tranquilo, y sigue con las croquetas anda
-Tu estas llorando por César no?
-Si, pero da igual, el ya es historia, muy a mi pesar
-Pero que has hecho ahora?
-Que que he hecho? Que no he hecho!!!
-Bueno, espera a que apago el fuego y me lo cuentas hijo, que me da que va para largo
-Si, vete y apaga el fuego anda
-Bueno, y que ha pasado Jaime, que has preparado esta vez para que César no quiera saber de ti?
-Pues que a ver....
-Venga hijo que no tengo todo el día, para una vez que me apetece cocinar y todo
-A ver, César me ha dejado
-Vale, eso es obvio, eres hijo de tu padre, la ibas a cagar, herencia genética, pero que has hecho?
-Pues que el otro dia en la selectividad estuve a punto de besar a Marta
-Que estuviste a punto de hacer que? de verdad que hay veces que pareces tonto, pero tonto tonto
-No paso nada mama, el caso es que el nos vio
-Ah, que encima te pilla, pero que os pasa, que en el apellido Martinez-Corrado sienta cátedra, no sois capaces si quiera de disimular? aunque sea un poquito? si lo hacéis, que los afectados no nos enteremos, no crees?
-Que no pasó nada mama, lo que pasa es que no se por que estuvo a punto de pasar, cuando yo a quien quiero es a él
-Y eso no se lo has dicho?
-Se lo quise decir, pero no me quiso ni escuchar, y luego hubo un incidente con Marta, y con la hermana de César, y ella se ofreció a ayudarme, y tambien tuve la ayuda inesperada de Marta tambien
-Y que pasó??
-Que de repente las cosas, lejos de mejorar, empeoraron
-Empeoraron?
-Si, empeoraron
-Pero cual era tu estrategia, bueno, la tuya y la de tus dos secuaces?
-Cual era?, pues provocarle primero celos con Nico, y luego fingir que no estaba seguro que lo quisiese
-Lo sabía, Jaime....eres tonto, ya es oficial
-Si, lo se, pero ya te digo que la reaccion de César ha sido la de tiraar por la calle de en medio, y decir que si realmente lo tengo claro, que me o diga, pero que de momento me olvide de él, hasta me ha devuelto la pulsera que le regalé
-Y por que no haces una cosa?
-El que?
-Lo que hacéis todos los hombres para que os perdonen
-Dispara
-Dile la verdad, y ya de paso te arrastras un poco, es lo único que te queda
-Pero si no quiere saber de mi
-Llamale, no creo que te diga que no, el te quiere, pero te toca echarle dos cojones, y decirselo tu
-Gracias mamá, creo que es la primera vez que me echas una mano
-Creo que es la primera vez que me has tratado como una madre
-Gracias
-Ven aqui anda, que ya verás como César al final, si que marcha contiggo a Santander, aunque lo tenga que llevar yo a rastras, y dejame que tengo que hacerte la comida
-Si, esas croquetas, me muero de ganas por ver tu estreno de cocinera
-A ver, que no me hace falta cocinar, sabes de sobra que por parte de tus abuelos yo tengo una posicion bien cómoda, pero me apetece ser mas independiente, así que primero fue la asistenta, y después he despedido a la cocinera, ahora solo estamos tu y yo, asi que quiero que me eches una mano
-Lo que usted diga mi sargento
-Pues ala, pon la mesa y a comer

Despues de comer, Jaime se puso a ensayar delante del espejo lo que le iba a decir a César, pero no le salía nada, absolutamente nada, todo le parecía una cursilada enorme, y cada vez se volvia más loco, porque nada le gustaba, siempre creia que iba a meter la pata, y que César le iba a dejar con la palabra en los labios, por lo cual estaba cada vez mas frustrado, por lo cual se oyo una voz desde el otro lado del baño

-Deja de decir tonterías y hazlo en el mismo momento, pero haz que te salga del corazón, que si no vas a estar comiendote la cabeza toda la noche
-Deja de husmear detras de la puerta y sigue con la colada, que la asistenta era más discreta!!
-Tu callate que a la asistenta la enseñe yo a husmear detrás de las puertas, como te crees que me entere de lo de tu padre?
-Mama por favor!!! hay cosas que es mejor no saber
-Mejor que las sepas, cuando crezcas, me lo agradecerás, hablo yo con César hijo?
-No déjalo, esto lo tengo que hacer yo
-Como quieras!! me voy a tender, que le estoy cogiendo el gusto a esto de ser una marujilla de mi casa
-Que peligro tienes mamá, madre mia

El resto de la tarde la pasó esperando al momento exacto en el que llamar a César para pedirle que le diese un minuto más, sólo un minuto más para poder hablar y decirle que él le quería y que no había habido un solo momento en el que no dejase de pensar en él, lo que pasa es que eso sólo le salían esas palabras cuando buscaba dentro, y no cuando se ponía a ensayar, le salía cuando le venía a la mente César, y no cuando se ponía delante del espejo, por eso se sentía tan idiota, y tan nervioso, era como declararse sin tener que declararse, y se dio cuenta de que nunca se había declarado delante de César, nunca se lo había dicho, lo que sentía por el, y creyó que eso le gustaría saberlo a César, por lo que no esperó más, y se decidió a llamar a César

-Hola
-Hola Jaime, que quieres
-Hablar contigo
-Son las dos de la mañana Jaime, es importante eso que me quieres decir?
-Tanto he esperado?
-Como dices?
-No, nada, que quetal has dormido?
-Bien, estaba durmiendo de cine hasta que me han despertado para peguntarme que que tal dormia, vamos que de cine
-Buen hijo si lo se no llamo
-A ver me quieres contar que es lo que te pasa por la cabeza?
-Que quería hablar contigo, pero esta vez sin intermediarios ni historias, solos tu y yo
-Por que
-Porque creo que ya hemos hecho mucho el gilipollas no crees?
-Bastante para que negarlo
-Entonces me das una oportunidad de hablar?
-Cuando?
-Pues hombre....partiendo de la base de que me voy el mismo viernes de las notas de selectividad, que es pasado mañana
-Que te vas el viernes? y eso?
-Porque me quiero ir cuanto antes César, creo que así descansaré más
-Entonces cuando
-Mañana por la tarde?
-E,e, esta bien, vale, mañana por la tarde
-Estate preparado
-Hay más sorpresas Jaime?
-Si, las va a haber
-En fin, no se por que lo hago, pero bueno, que hasta mañana
-Que descanses
-Igual

César se quedó pensando dos cosas, o bien que Jaime era muy tonto, o bien que se habia terminado de volver loco, porque después de la de sorpresas, y ninguna agradable que se había llevado toda esta semana, y que todavía tenga ganas el señorito de juerga, en fin, que no sabía el por que (en realidad si que lo sabía), pero al final le iba a dar esa oportunidad que le había pedido, pero esta vez, no iba a ver otra, era la última que le daba

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